¿Las culebras son peligrosas?

Las culebras o colúbridos son de la familia de las serpientes y alberga aproximadamente 1800 especies. La mayor parte de las culebras son inofensivas, pese a que algunas son venenosas.

Diferencia entre culebras y serpientes

Para empezar, ha de quedar clara la diferencia entre las culebras y las serpientes: no todas las serpientes son culebras, pero si todas las culebras serpientes. Las serpientes abarcan distintas familias como la de los vipéridos (crótalos y víboras), o la familia de los elápidos (cobras, serpientes de coral, mambas, serpientes marinas). Es decir, las culebras son una de las familias del grupo de serpientes.

Culebras peligrosas en la Península Ibérica

En la Península Ibérica existen 15 tipos de serpientes. De esas 15, solo 3 son víboras, mientras que las 11 restantes son culebras. Para nuestra tranquilidad, solo dos de esas culebras son venenosas. Este es el caso de la culebra de cogulla occidental y de la culebra bastarda.

• Culebra de cogulla occidental

Esta culebra es posiblemente el ofidio más pequeño en la Península Ibérica, ya que su longitud máxima es de 598 milímetros. Su cabeza y hocico son cortos, utilizados para excavar la arena y tierra donde suelen permanecer. Sus escamas son de tono grisáceo, y la cabeza en forma de uve. Tiene veneno en sus colmillos posteriores, que utiliza para cazar a sus presas. Es por esto que es considerada peligrosa, ya que consigue matar presas de tamaños relativamente grandes.

Soportan altas temperaturas, por lo que suele utilizar carreteras para transportarse. Las culebras de cogulla occidental viven bajo la tierra y arena. El borde de los arroyos, claros en los bosques o dehesas son lugares donde suelen vivir.

Debido a sus hábitos subterráneos, salen al exterior en contadas ocasiones, sobre todo al atardecer o noches templadas.

• Culebra bastarda

La culebra bastarda es otra de las especies venenosas de la península, ya que tiene dientes en la parte posterior de la boca que canalizan veneno. Es una de las especies más grandes de la Península Ibérica, ya que los machos adultos pueden superar los 2 metros, llegando incluso a las 2,5 metros de largo. Es una especie ofiofága, es decir, se alimenta de otras serpientes y culebras, incluyendo las víboras.

La culebra bastarda, a diferencia de la cogulla occidental, es diurna. Además, es rápida y agresiva, y tiene una escama característica sobre que el ojo, que simula una ceja. Es de color verde con manchas oscuras, pese a que estas manchas van desapareciendo con la edad.

 Evitar plagas de culebras

Pese a que muchas de las especies de culebras en la península no sean venenosas, que estas se nos cuelen en nuestros hogares o negocios no es agradable. Este es un peligro añadido, por lo que a continuación os daremos algunos consejos para evitarlas.

• No dejar las ventanas y puertas abiertas

En concreto, hemos de intentar cerrar las puertas y ventanas que den a patios y jardines, ya que a las serpientes les gustan los lugares húmedos y frescos. Por lo que si acceden a nuestras casas, es posible que se acomoden en el sótano, en el garaje o en plantas bajas.

• Evitar la maleza

La hierba alta es otro de los lugares favoritos de las serpientes y culebras. Es por eso que lo mejor es evitar que la hierba de nuestro jardín no supere los 5 cm de alto.

• Tener controladas otras plagas

Los ratones u otros insectos pueden ser un aliciente para las serpientes, ya que son la fuente de alimentación de algunas especies.

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